REMODELACION LABIAL

Sirve para...

Labios pequeños, hundidos, escasamente perfilados o poco carnosos.

Y es que, desde hace varios años, unos labios gruesos y carnosos, al estilo de los de la actriz Kim Bassinger, simbolizan juventud, belleza y, sobre todo, sensualidad.

Hay que señalar que, amén de los casos constitucionales, la pérdida y no adecuada reparación de piezas dentarias o, en el caso de la mujer, la pérdida de masa ósea (osteoporosis) consecutiva a los transtornos hormonales de la menopausia, producen una disminución no deseada del volumen de los labios, una indefinición y la aparición de arrugas verticales.

Así funciona...

Consiste en la implantación de un material biocompatible en ciertos puntos y trayectos perfectamente definidos de la región labial (labio superior, labio inferior o ambos). La implantación puede realizarse en la zona retrolabial, consiguiendo el efecto, no por puro relleno, sino por apoyo en la arcada dentaria; produciendo, sobre todo, proyección anterior y eversión/rotación (más zona mucosa expuesta). También puede realizarse en la zona más carnosa de los labios, para producir aumento global de su volumen; o en su borde estricto, para producir definición o perfilación. En ocasiones, se rellenan también las comisuras (cantos externos) y/o los filtros, que son esos dos pequeños relieves que existen en el labio superior y se dirigen verticalmente hasta la nariz; ello rejuvenece y sensualiza mucho la región de la boca.

Pueden utilizarse materiales fluidos (colágeno, ácido hialurónico, metacrilato en suspensión, poliacrilamida, polialquilimida, ácido poliláctico, etc.), que se implantan con jeringa y aguja. Puede también implantarse grasa propia (obtenida en una liposucción), que también se implanta con jeringa, y aguja o microcánula;  ciertos materiales sólidos (filamentos ó laminas de PTF-E, etc.); o incluso bandeletas de tejidos propios, obtenidos de alguna parte del cuerpo, que se implantan con técnicas de microcirugía. En el mismo paciente, pueden utilizarse varios materiales, en diferentes zonas y/o con diferentes propósitos. De todos estos materiales existe una breve descripción en el Capítulo “Implantes de relleno”.

En todos los casos, se emplea exclusivamente anestesia local (crema o spray) o loco-regional.

Resulta particularmente interesante la posibilidad de efectuar un test previo: consiste en la adecuada interposición de un pequeño rollito de algodón entre los labios y los dientes. De esta manera, el paciente puede hacerse una idea del probable resultado. En este mismo sentido, existe la posibilidad de realizar un primer tratamiento con un material total y rapidamente reabsorvible.

En qué consiste...

Algunos materiales requieren un test previo, para descartar alergias o hipersensibilidades, que debe ser valorado en un periodo mínimo de 40 días; otros son totalmente inertes y pueden utilizarse inmediatamente.

En remodelación labial se impone la norma básica de que, en todos los casos, la corrección debe obtenerse en el tiempo y no en el espacio; es decir, que es mejor corregir paulatinamente que producir una hipercorrección, que pudiera no ser bien aceptada por el paciente y, además y según el material implantado, irreversible o de complicada reversión.

Lo habitual, en los casos de remodelación labial, es que de una a tres sesiones sean suficientes.

Cuánto tiempo supone...

Varía según el material y, por lo tanto, el procedimiento escogido.

En general, de quince a sesenta minutos.

Qué puede ocurrir...

Un cierto edema aparece inmediatamente, y persiste unas horas o dos o tres días. Sin embargo, salvo en raras ocasiones, no se aprecia ninguna señal externa, por lo cual la reincorporación a las actividades sociolaborales es inmediata.

Durante venticuatro horas se desaconseja fumar, ingerir alimentos calientes o que precisen mucha masticación, y gesticular excesivamente con los labios.

No es infrecuente la necesidad de pequeños retoques para corregir asimetrías.

Existen algunos inconvenientes o complicaciones propias de cada material, descritas someramente en el Capítulo “Implantes de relleno”.

BHEQM opina...

Es un tratamiento simple, y a la par excelente, que proporciona una satisfacción justificada en la mayoría de los casos.

Puede modularse y adaptarse perfectamente a todos los pacientes y situaciones, porque permite agrandar y/o adelantar y/o perfilar y/o evertir; uno, otro, ambos labios o toda la región labial.

Asimismo la remodelación labial permite complementar la actuación y eficacia de otros procedimientos en el caso de las tan frecuentes arrugas en los labios (envejecimiento o expresión).

Piénsese que en los labios se concentra una gran parte de la sensualidad y expresividad de un rostro.